Estamos en una sociedad industrializada en todo sentido y aunque para muchos eso puede significar solo comodidad resulta ser todo lo contrario ya que estos excesos se han convertido en la mayor problemática de nuestra sociedad.
En este tema quiero referirme
especialmente al consumo de la comida chatarra que como muchos sabrán se ha
convertido en la mayor causa de muertes en nuestros días, además de acortar el
promedio de vida de muchas personas es un enemigo silencioso que a nuestros
ojos parece bueno, barato y accesible pero no se engañen ya que deacuerdo a
diferentes estudios estos alimentos están relacionados con enfermedades como el
cáncer, hipertensión, diabetes e inclusive en deformidades de los fetos.
La situación se vuelve muy
contraproducente porque uno cree que compra algo barato cuando compra un
alimento con aditamentos sintéticos pero cuando se acude a un médico, inclusive
estando asegurado puede llegar a perder en promedio un mínimo de 100 mil dólares
en el caso de un problema complejo como es el cáncer, incluso muchas personas
han gastado mucho mas cuando tratan de bajar de peso sin resultados positivos. Además
de las secuelas del tratamiento que impiden que las personas se puedan
desenvolver con normalidad.
Para profundizar el tema hablare
de como una mala alimentación tiene relación con muchas enfermedades incurables.
Además de entender el problema es también necesario una solución como es tener
una vida más sana, además de cambiar de dieta como entender que si uno come
alimentos sanos pero estos han sido tratados con pesticidas o alterados genéticamente,
estos pierden sus propiedades y pueden llegar a ser un peligro para nuestra
salud. También tenemos que tomar en cuenta el papel fundamental que juega un
ambiente apropiado para las personas el cual debe estar alejado de
contaminantes como son el smock, el ruido, el estrés que también es un enemigo
latente de nuestra salud.
1. ¿Qué se sabe de la relación
entre la obesidad y el cáncer?
La obesidad está asociada con
riesgos mayores de los siguientes tipos de cáncer, y posiblemente de otros
cánceres también:
. Esófago
. Páncreas
. Colon y recto
. Seno
. Endometrio
. Riñón
. Tiroides
. Vesícula biliar
Un estudio, que usó los datos del
programa del NCI de Vigilancia, Epidemiología y Resultados Finales (SEER),
calculó que en 2007, en los Estados Unidos, cerca de 34 000 casos nuevos de cáncer
en los hombres (4%) y 50 500 en las mujeres (7%) se debían a la obesidad. El
porcentaje de casos atribuidos a la obesidad varió mucho según los diferentes
tipos de cáncer pero fue tan alto como 40% para algunos cánceres, especialmente
para el cáncer de endometrio y el adenocarcinoma de esófago.
Una proyección del gravamen
futuro de la obesidad en la economía y en la salud en 2030 calculó que si
continúan las tendencias existentes de obesidad se llegará a casi 500 000 casos
adicionales de cáncer en los Estados Unidos para 2030. Este análisis encontró
también que si cada adulto reducía su IMC en 1%, lo que equivaldría a adelgazar
más o menos 1kg (o 2,2 libras) en un adulto de peso promedio, esto prevendría
el aumento del número de casos de cáncer y resultaría en realidad en evitar
cerca de 100 000 casos nuevos de cáncer.
Se han sugerido varios mecanismos
posibles para explicar la asociación entre la obesidad y un mayor riesgo de
algunos cánceres:
. El tejido adiposo (graso)
produce cantidades en exceso de estrógeno, y concentraciones altas de esta
hormona se han asociado con el riesgo de cánceres de seno, de endometrio y de
otros.
. La gente obesa tiene con
frecuencia concentraciones mayores de insulina y el factor de crecimiento como
la insulina-1 (IGF-1) en su sangre (una afección conocida como hiperinsulinemia
o resistencia a la insulina), lo cual puede fomentar la formación de algunos
tumores.
. Las células grasas producen
hormonas, llamadas adipocinas, las cuales pueden estimular o inhibir el
crecimiento celular. Por ejemplo, la
leptina, que abunda más en gente obesa, parece que fomenta la proliferación
celular, mientras que la adiponectina, que es menos abundante en gente obesa,
puede tener efectos antiproliferativos.
. Las células adiposas pueden
tener también efectos directos e indirectos en otros reguladores del
crecimiento de tumores, incluso la proteína cinasa activada por el blanco
mamífero de la rapamicina (mammalian target of rapamycin, mTOR) y por el
monofosfato de adenosina, (adenosine monophosphate, AMP).
. La gente obesa tiene con
frecuencia inflamación crónica en un grado bajo o "sub-agudo", lo
cual está asociado a un mayor riesgo de cáncer.
. Otros mecanismos posibles son
las reacciones imnunitarias alteradas, los efectos en el sistema del factor nuclear
kappa beta y el estrés oxidativo.
3. Otras enfermedades producto de
la comida chatarra:
Según la primera firmante del
trabajo, “una posible explicación es la alta presencia de grasas tipo trans en
este tipo de alimentos. Estas grasas pueden tener efectos negativos sobre
diferentes sistemas biológicos incrementando, entre otros efectos, el riesgo de
enfermedad cardiovascular. También la ingesta de este tipo de grasas se ha
asociado con un mayor riesgo de depresión. Su mecanismo de acción está relacionado
con un incremento en la producción de citoquinas y con un empeoramiento en el
funcionamiento del endotelio (tejido que recubre los vasos sanguíneos)”.
“Las citoquinas pro-inflamatorias
“son sustancias con capacidad inflamatoria que se relacionan con una
disminución en la síntesis de neurotransmisores (necesarios para la transmisión
nerviosa y que se encuentran disminuidos cuando se da la enfermedad mental) y
de factores relacionados con el adecuado funcionamiento neuronal y que se
denominan neurotrofinas”, apunta la investigadora.
El endotelio “es capaz de
sintetizar y secretar algunas de estas neurotrofinas, por lo que un
funcionamiento inadecuado de éste podría conducir a un inadecuado funcionamiento
cerebral”, puntualiza.
Aunque pudiera ser que las
personas con depresión sean las que más alimentos basura consumen, la experta
argumenta por qué ésta no es una explicación a los resultados de su
investigación. “El estudio está basado en participantes que cuando iniciaron el
estudio no tenían la enfermedad. Para evitar que, a pesar de todo, hubiera un
número de sujetos que ya estuvieran deprimidos pero todavía no diagnosticados,
se repitió el análisis eliminando a todos aquellos participantes que recibieron
el diagnóstico a los dos años de haber accedido a participar en el estudio y
cuyos datos sobre la dieta pudieran estar influidos por la presencia de un
trastorno depresivo no diagnosticado. Los resultados no cambiaron”.
3. Los beneficios de una dieta
sana:
Seguir una dieta rica en grasas y
pobre en vitaminas, minerales y antioxidantes nos ayudará a disminuir nuestro
estado de ánimo y poder desarrollar una enfermedad como la depresión.
Niños que consumen comida chatarra
como pizza, papas fritas y galletitas antes de los tres años de edad tienen
niveles de CI más bajos que los que comen alimentos caseros con frutas y
verduras. Según una investigación realizada en el 2010 que se publicó en el
periódico "Journal of Epidemiology & Community Health", estos
niños se evaluaron durante cinco años y sus puntuaciones de CI fueron de al
menos cinco puntos menos que aquellos que comían alimentos más saludables. Los
investigadores concluyeron que era posible que el efecto negativo de la ingesta
de comida chatarra a tan temprana edad no se puede alterar incluso si se siguen
hábitos alimenticios saludables en el futuro ya que está relacionado con un
desarrollo cerebral entorpecido.
Muchos de los episodios
depresivos que sufren personas con obesidad se deben a que su exceso de peso
les deprime. Por su parte, las personas deprimidas sufren ansiedad, que a
menudo se traduce en una necesidad imperiosa de comer. De hecho, algunas pueden
ingerir más de 5.000 calorías en un atracón. Estas personas buscan sentirse
saciadas, por lo que comen muchos hidratos de carbono. En algunos casos, se
produce una auténtica adicción a la comida con el fin de calmar la ansiedad, lo
que puede derivar en obesidad, dice el informe.
El intestino y el cerebro están
en constante comunicación a través del nervio vago. Por lo que mantener un
intestino sano, brinda mejores respuestas al cerebro.
Un exceso de masa grasa
almacenada en el cuerpo secreta excesos de compuestos inflamatorios que viajan
al hipotálamo del cerebro y provocan descontrol. Esto causa serios problemas
sobre el estado de ánimo. Así, personas que presentan obesidad químicamente
tienen un mayor riesgo de desarrollar depresión.
Alimentación inadecuada,
intolerancias alimentarias y resistencia a la insulina (prediabetes y diabetes)
también provocan inflamación en el sistema. Ante este estimulo, como protección
el cuerpo responde secretando mayor cantidad de cortisol (la “hormona del estrés”) y disminuye magnesio;
un mineral necesario para un estado de relajación y un sueño adecuado. Asimismo
altos niveles de cortisol se relacionan con desarrollo de depresión.
Una mala alimentación provoca
desbalances nutricionales que se relacionan con deficiencias en la producción
de serotonina (un neurotransmisor importante que interviene en el control del
estado de ánimo), ansiedad y trastornos de conducta.
4. Que debemos comer:
Para ello es necesario brindarle
alimentos que no sean difíciles de procesar y esto es sencillo de hacer: entre
más similar es el alimento a su forma pura o natural, mas fácil va a ser
digerirlo. Así manténgase alejado de alimentos altamente procesados y llenos de
aditivos artificiales y enfóquese en brindarle más cantidad de alimentos en su
estado natural como frutas, vegetales, semillas, leguminosas y proteínas.
Asimismo usted puede optar por suplementar su alimentación con probióticos, los
cuales mejoran la salud de su intestino de manera muy efectiva.
Las futas son fuentes de un
sinnúmero de vitaminas, minerales y químicos naturales que son necesarios para
las reacciones internas de nuestro organismo, incluyendo la integridad del
sistema nervioso. Consuma frutas por la mañana e incluya una porción grande de
vegetales en su almuerzo y su cena, haciéndole énfasis a los vegetales de color
verde oscuro, además no se olvide de incluir al menos una porción de vegetales
crudos por día.
El nutriente antiinflamatorio por
excelencia es el Omega 3. Para ello suplemente su dieta con DHA y aumente el
consumo de alimentos fuentes de esta maravillosa grasa: pescados salvajes
(atún, salmón salvaje, trucha y sardinas) o carne de res orgánica (también llamada
de pastoreo), semillas de linaza molida, chía y nueces, alimentos suplementados
con omega 3 como los huevos y el aceite de oliva. Preferiblemente no la de soya ya que muchas empresas productoras de soya especialmente en Brasil son responsables de talas masivas de arboles, ademas de haber sido modificadas geneticamente.
Como iba diciendo es necesario
verificar las fuentes de estos alimentos muchos pueden estar relacionados con
la deforestación y plantas transgénicas que solo nos generarían un efecto contraproducente,
ya que mucho del ganado últimamente proviene de selvas deforestadas y sabemos
que sin arboles no tenemos oxígeno en la tierra además de que son filtros
naturales de gases tóxicos. Lo mejor es buscar fuentes aledañas y estas no
deben estar cerca de bosques silvestres.
También hay que tomar en cuenta
que el exceso solo puede ser perjudicial sea de carne incluso de ciertas
verduras y frutas.
5. Hay que hacer ejercicios todos los días:
Para ello es fundamental la
práctica de 150 a 300 minutos de ejercicio físico cada semana. Asimismo es
necesario llevar una alimentación balanceada entre todos los grupos de
alimentos dándole un enfoque especial al grupo de las frutas y los vegetales.
Se deben realizar tanto
ejercicios aeróbicos como anaeróbicos.
. Ejercicios aeróbicos:
Los ejercicios aeróbicos no son
más que “El ejercicio físico que necesita de la respiración como función para
aplicarlo de manera correcta” Es fácil, pero a veces, sólo algunas veces puede
ser un poco difícil de ejecutar ya que se requiere de sincronización de la
actividad con la respiración, algunos beneficios son los siguientes:
_ Ayuda y mejora la función
cardiovascular
_ Reduce los niveles del
colesterol en la sangre
_ Mejora la capacidad pulmonar
_ Disminuye a corto plazo la
presión sanguínea
Y estos son algunos nada más de
los beneficios, este tipo de ejercicios puede practicarse como: Ciclismo,
running, baile, caminar a un buen ritmo, natación, entre otros…
Hacer running es un tipo de
ejercicio aeróbico
. Ejercicios Anaeróbicos
Este tipo de ejercicio se le
precisa como “Ejercicio sin falta de aire” ya que no lo necesita, pero sigue a
una gran intensidad en el metabolismo y es utilizado para desarrollar
musculatura, sus beneficios son los siguientes:
_ Ayuda a desarrollar los
músculos del: Abdomen, Brazos, piernas, glúteos, entre otros…
_ Mejora la resistencia en el
individuo
_ Es efectivo en la eliminación
de grasa en el cuerpo
La manera de practicar este
ejercicios es: Levantando pesas, realizando ejercicios de abdomen, haciendo
deportes (futbol, baloncesto, tenis, etc...)
6. Agregue alimentos fuentes de
nutrientes que mejoren su estado de ánimo
Triptófano: Necesario para que la
producción de serotonina, entre ellos el chocolate oscuro (75% o más de cacao orgánico),
avena integral, albaricoques secos, pescado.
Magnesio: Semillas
Vitamina D: para poderla
sintetizar es necesario la luz solar, por esta razón se recomienda exponerse a
la luz solar en horas adecuadas al menos 10 minutos cada día.
Alimentos fuentes de vitamina B
6: aguacate, banano, leguminosas, nueves, granos enteros (integrales), carne de
res y pollo.
Alimentos fuentes de vitamina
B12: huevo, carne de res, pollo, mariscos y productos lácteos.
Fuentes:
Web:
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